Pues es curioso porque empecé a hacer magia cuando tenía 15 años porque era muy tímido y de esa forma, con trucos, podía perder ese miedo a empezar a hablar con otros (y a acercarme a las chicas con la excusa jajajaja)
La magia me ha gustado desde pequeño porque ver cosas que parecen imposibles es algo de lo que nunca me canso. Incluso hoy me encanta ir a espectáculos de magia de todo tipo y disfrutar con ellos.
Pues hay un truco que me gusta mucho hacer por lo sorprendente que resulta y es conseguir hacer una tortilla francesa en un jersey de un espectador sobre su cabeza y sin usar fuego. Espero que me veas hacerlo algún día 😉
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